Una Gotita Filipense en Kenia

«El que tenga sed, que venga a mí; el que cree en mí, que beba. De sus entrañas manarán ríos de agua viva.” (Jn. 7, 37)

   Modo concreto en que el fundador o la fundadora vivieron la experiencia de Cristo, María y la Iglesia. Así la conjugación de la espiritualidad aportada por uno y otro encontramos la espiritualidad propia dela Congregación (ENCARNA, RENUEVA, TRANSMITE). Esta espiritualidad personal de cada uno de ellos puede transmitirse por completo a la congregación que fundan. Por tanto no es un legado para conservar, sino es un llamado personal de Dios a cada uno para vivirle de un modo concreto y así llegar a realizarnos como personas y cristianos, y dar a diario forma y ser a la Congregación según el espíritu.

 LA ESPIRITUALIDAD DE LA CONGREGACIÓN

Rasgos de nuestra vivencia de Cristo

• Jesús Buen Pastor, que lleva a la oveja perdida sobre los hombros.
• Jesús Buen Pastor, a quien conocen sus ovejas.
• Jesús Catequista
• Jesús nos invita: Dadles vosotras de comer
• Jesús se ofrece al Padre incondicionalmente por la salvación del mundo
• Jesús se anonada, hemos de vivir la kénosis de Cristo que se abajó para estar más cerca de los de abajo.
• Participamos de los rasgos de ese Jesús sencillo, cercano, acogedor, a quien cualquiera puede acercarse sin sentir rechazo…
• Jesús es alegría (comilón y borracho) para los demás.
• Jesús perdona desde la Cruz
• Jesús llega a sufrir el martirio por AMOR

Rasgos de nuestra vivencia de María

•  Es la Madre Dolorosa, Corredentora
• – Es siempre MADRE
• – Acoge a todos aquellos a los que el Hijo le entrega desde la cruz, es decir, a todos los crucificados del mundo.
• – Es la María Dolorosa de los Siete Dolores, no sólo está junto a la Cruz, sino también en los demás momentos de sufrimiento. Y está de pie.
• – Es nuestra intercesora ante el Padre para rogar por nuestras destinatarias.
• – Es la veladora de nuestras casas y hogares, la MADRE, en último caso, de nuestras acogidas.
• – Participamos de su sencillez de vida y de su pequeñez.
• – Como Ella, somos intercesoras ante el Hijo para que en la boda haya vino.

Otros rasgos importantes de nuestra espiritualidad heredados de nuestros fundadores o de San Felipe Neri.

• Nuestro Dios es Trinidad, y como tal le adoramos y servimos, por eso nuestras comunidades deben ser imitación de la Trinidad
• El amor y confianza en San José.
• La confianza infinita en la providencia de Dios que guarda nuestra Congregación, precisamente porque es obra suya y no nuestra.
• La infinita libertad.
• La aceptación de nuestra pequeñez en la Iglesia, en la que no podemos faltar, ya se encargará el Señor de eso.
• El valor fundamental de la acogida.
• La importancia de que nuestro apostolado y predicación vaya precedido por la oración.
• La importancia de predicar la buena nueva a nuestras/os destinatarias/os.
• La importancia de predicar la buena nueva a nuestras/os destinatarias/os.

Misión

• El padre Tejero y Madre Dolores, en la misión que Dios les confió, se sintieron enviados con preferencia a la mujer marginada, por ello nos dedicamos a:
• Acoger y formar humana y cristianamente niñas y jóvenes marginadas (Const. Cap. I, art. 9) Hogares Protección.
• Ayudar a las niñas y jóvenes en su educación humana y cristiana, educación Colegios.
• MISIONES,  Presencia en lugares  de marginación.

Patronos:

                  

Nuestra Señora de los Dolores

Frecuentemente aparece representada en el momento de la piedad con su hijo Jesús muerto sobre su regazo, tras el descendimiento, y otras veces con expresión de desconsuelo al pie de la cruz, sosteniendo sedente la corona de espinas de su hijo.

En ocasiones, se la representa con siete espadas que le traspasan el corazón. Su imagen es llevada en procesión  durante la Semana Santa en numerosas localidades españolas, destacando los iconográficos establecidos por los pasos de la denominada esperanza Macarena de Sevilla, imagen de vestir bajo palio, y el de la Virgen de las Angustias de Juan de Juni, en Vallodolid, que presenta la figura de María abatida de dolor a los pies de la cruz.

“Tengan especial cuidado en ejercitar la inteligencia pero, sobre todo, en formarles sólidamente el corazón”.

(P. Francisco García Tejero)